- Un evento insignificante del pasado
- Cantidad necesaria de horas de encierro
- Una persona adecuada para generar una pelea
- Un comentario malintencionado
- Amargura a gusto
Tome el evento insignificante del pasado y exagérelo en su cabeza hasta que sea imposible distinguir la verdadera magnitud del evento. Deje reposar durante 40'. Una vez alcanzado el punto deseado, enciérrese en soledad a pensar sobre lo (no) ocurrido. Espere a sentir el nudo en la garganta característico. Luego, haga un comentario malintencionado para generar una pelea. Busque para ello a la persona adecuada. Generada la pelea, cultive el rencor correspondiente producto de ella. Extienda ese odio a la humanidad. Llevado a cabo este proceso solo resta condimentar con amargura a gusto. Y ya está oficialmente de mal humor.